Chelsea goleó al Real Betis 4-1 y se consagró campeón de la UEFA Conference League 2024/25 en Polonia. Enzo Ferández y Moisés Caicedo no se quisieron perder la fiesta y ambos marcaron en la final.

El conjunto inglés reaccionó en el momento oportuno, golpeó con contundencia y cumplió con las expectativas de levantar el trofeo. El equipo del Ingeniero Pellegrini tuvo una primera parte prácticamente perfecta en el Estadio Wroclaw de Breslavia. En el arranque, fueron los de Enzo Maresca los que buscaron imponer su juego, pero rápidamente el conjunto de Sevilla detectó la idea de los Blues y la empezó a contrarestar poco a poco. Isco, observando que Malo Gusto se tiraba todo el tiempo a la mitad de la cancha, lo presionó y le robó la pelota.

El capitán del conjunto español asistió a Abde Ezzalzouli, que se colocó donde no estaba el lateral de Chelsea, y el marroquí la cruzó de zurda para el 1-0 a los 9 minutos. Desconcertados por estar abajo, los Blues empezaron a cometer varios errores y Marc Bartra aprovechó para sacar un precioso disparo colocado desde fuera del área, pero el arquero Filip Jorgensen se encargó de sacar la pelota que se metía en el ángulo izquierdo y la mandó al tiro de esquina a los 12 minutos.

Sobre los 30 minutos, los de Londres se animaron un poco más, pero no pudieron romper el cerrojo que les impuso Betis. Por eso, los españoles se fueron arriba al entretiempo por la mínima. Durante los primeros 45 minutos, el conjunto atacó todo el tiempo por izquierda, haciendo que Gusto se viera completamente desbordado y tuviera un mal rendimiento.

Tan mal jugó el francés que Maresca decidió que se quede en el banco en el segundo tiempo y en su lugar ingresó Reece James. Pellegrini también tuvo que meter mano en el equipo, ya que se quedó en el vestuario Ricardo Rodriguez y, a los 53, salió el autor del gol por una molestia física. Por ellos ingresaron Romain Perraud y el juvenil de 19 años, Jesús Rodríguez.

En el complemento, Chelsea salió con otra actitud y a imponer la gran categoría de sus jugadores por sobre el sistema de Betis. Los ingleses se acercaban con peligro, pero no podían acertar en el último toque y los minutos seguían corriendo. Todo cambió en cinco minutos con una ráfaga furiosa de Chelsea en Polonia.

Primero fue Cole Palmer que metió un centro milimétrico de frente entre los centrales, para que Enzo Fernández llegue desde atrás y marque el empate 1-1. Cuando se jugaban 70 minutos, Palmer hizo un jugadón por derecha y asistió a Nico Jackson, que con el pecho puso el 2-1 para desatar la locura de los hinchas que estaban presentes en el estadio.

Betis acusó el golpe de los dos goles en cinco minutos y no pudo reponerse, al punto que no volvió a patear al arco y empezó a cometer varios errores. En una salida, perdieron la pelota y Kiernan Dewsbury-Hall asistió a Sancho, para que el inglés ponga la pelota en el ángulo izquierdo y estableciera el 3-1.

Con el equipo jugado totalmente en ataque, Enzo comandó un gran contragolpe y asistió a Moisés Caicedo, que con un buen remate de derecha marcó el 4-1 definitivo. De esta manera, Chelsea se convirtió en el primer equipo en la historia en lograr consagrarse campeón en los tres grandes títulos europeos.